Te espero cada día asomada a esta ventana,
no me importa que digan que soy una chalada,
por encima de todo espero tu mirada,
espero tu sonrisa, espero tu palabra.
Si hasta el árbol más seco vuelve a reverdecer,
no importa lo que digan, yo te volveré a ver,
pueden pasar minutos, puede que pase un siglo,
te volveré a encontrar, en las aguas de un rio,
al cruzar un desierto, sentado en un camino,
o en la raiz profunda del invierno más frio.
No importa que parezca que todo lo he soñado,
cuando beses mis labios, yo te estaré esperando.
10 comentarios:
Isabel, esa poesía la siento muy dentro de mi. Gracias.
Gracias a ti por tu visita, me alegra que te guste.
Besicos.
Siempre hay que esperar y seguir soñando.Cuando se pone esta fe que pones tú en tu poema,seguro que al final encontrarás lo que buscas.
Me gustaron estos versos tan musicales...
Abrazos.
Gracias Maestro.
Un abrazo.
Esa persona que tenemos asignada en nuestro destino, tarde o temprano se encontrará con nosotros. Un poema muy bonito.
Besos
Te espero día y noche desde la ventana de mi corazón.Tú mirada es mi luz y sentimiento, tus ojos son mis esperanzas de amor futuras. Magnífico tu poema de amor. Enhorabuena. Un fuerte abrazo.
Sí. Y mientras pasa el tiempo y no se conservan las mismas energías, la esperanza empero siempre está ahí inamovible.
Gracias a mis amig@s por comentar, Julia, Olegario y Vicente.
Os abrazo con mucho cariño.
Hola guapa!! me encanta tu poesía en general esta me llego al alma y ,hoy visitando tu blog me he vuelto a emocionar!! un abrazo
Gracias preciosa, otro abrazo para ti.
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